viernes, 9 de abril de 2010

Les ofrecia tentador empleo a sus víctimas.


Erasmo Moena Pinto (40) pasó 11 de sus últimos 18 años en la cárcel, condenado por diversos delitos. Recuperó su libertad el 14 de marzo, pero en lugar de rehacer su vida, protagonizó una seguidilla de violaciones y homicidios que -24 días después- lo llevó de vuelta a prisión y a ser calificado por la Policía de Investigaciones como uno de los psicópatas más peligrosos del último tiempo.Moena, de 40 años, inició sus ataques el 19 de marzo en la Región del Biobío, tras salido de la cárcel de Mulchén. Cometió cinco abusos sexuales. En los dos últimos no sólo ultrajó a sus víctimas, sino que además las agredió -provocándoles fracturas y policontusiones- y las asesinó, estrangulándolas con un lazo, para luego ocultar sus cuerpos en un bosque de Valparaíso. Moena fue detenido antenoche en Viña del Mar, confesó sus crímenes y será formalizado mañana. Tenía un metódico plan para atraer a sus víctimas. Ya lo había aplicado con la mujer a la que violó en 2007 en Los Ángeles, por lo cual cumplió la última de sus condenas, a tres años sin beneficios: se hacía pasar por empresario maderero para ofrecer empleo a las mujeres.


En 18 días fuera de la cárcel cometió cinco abusos sexuales y dos asesinatos, interesante caso Criminlogico ¿no?

miércoles, 7 de abril de 2010

Peritaje policial revela que joven Mitjans cayó desde una altura de 22 metros antes de morir


Los peritajes efectuados por el Laboratorio de Criminalística (Labocar) y por el Grupo de Operaciones Especiales (Gope) de Carabineros revelaron que Juan Pablo Mitjans Saa cayó desde una altura de 22 metros antes de perder la vida en el sector de la copa de agua, a un costado del cementerio Parque del Sendero, parte alta de Llo Lleo.
Según una fuente policial cercana a la investigación, esta conclusión se basó en el rastreo de las huellas dactilares y de las zapatillas del joven de 19 años, quien desapareció la madrugada del martes 23 de febrero pasado, desde la discoteque Ice de Santo Domingo, donde se encontraba compartiendo con un grupo de amigos.
Los especialistas del Labocar y el Gope escalaron hasta la cima de la antena de telefonía celular ubicada en el sector y constataron que las huellas del estudiantes estaban marcadas en los fierros de la estructura hasta la altura de 22 metros, lo que equivale a un edificio de 8 pisos.
SUICIDIO
"Realmente sólo él (Juan Pablo Mitjans) sabe si se tiró al vacío de manera voluntaria o si cayó de manera accidental, pero para nosotros está absolutamente confirmado que se trató de un suicidio y que en el caso no hubo intervención de terceros", comenta un policía que participó activamente en todas las diligencias posteriores a la desaparición del hijo del empresario Eduardo Mitjans, dueño de la compañía de licores que lleva su apellido.
Uno de los antecedentes que descarta la intervención de terceros en el fallecimiento es una prueba que Carabineros manejó en absoluta reserva durante toda la investigación. Se trata de la grabación de una cámara de televigilancia de la Municipalidad de Santo Domingo que captó el momento en que el muchacho caminaba solo por el puente Lo Gallardo, que une las comunas de Santo Domingo y San Antonio, en dirección a Llo Lleo.
Las imágenes del joven fueron registradas entre las 4.30 y las 5.00 de la madrugada, hora que calzaba perfectamente con la versión entregada por testigos que dijeron haber visto a Mitjans Saa alrededor de las 3.30 de la madrugada en los estacionamientos de la discoteque ubicada en la Ruta de la Fruta.
AGONIZO EN EL LUGAR
La conclusión a la que llegó Carabineros concuerda plenamente con los resultados de la autopsia practicada por el Servicio Médico Legal de San Antonio. Según los exámenes, la muerte se debió a un politraumatismo (fracturas múltiples) provocado por una caída en altura.
Los análisis científicos practicados en el sitio del suceso revelaron otro antecedentes impactante: tras la caída desde la antena de celular, el joven no falleció inmediatamente, sino que agonizó largos minutos, según las evidencias cianóticas que miden el nivel de oxígeno en algunas partes del cuerpo. El muchacho tenía las yemas de los dedos ennegrecidas, signo que revela que no murió instantáneamente.
Respecto a la presencia de drogas o alcohol en el cuerpo de la víctima, la fuente policial explicó que "eso lo debería revelar el examen toxicológico practicado por el Servicio Médico Legal y cuyos resultados deben estar en manos de la Fiscalía".
Juan Pablo Mitjans desapareció misteriosamente la madrugada del 23 de febrero. Más de 100 efectivos de la PDI y Carabineros lo buscaron durante cinco días, hasta que la mañana del domingo 28 su cuerpo sin vida fue encontrado en la parte superior de un estanque de agua, ubicado justo al lado de la antena de telefonía celular